La seguridad alimentaria es esencial en el sector gastronómico. Para garantizar que los alimentos sean seguros para el consumo, es fundamental seguir normas adecuadas durante su manipulación.
A continuación, se enumeran algunas de las mejores prácticas:
- Lavado de mano regular: Antes y después de manipular alimentos, los manipuladores deben lavarse las manos con agua y jabón. Esto previene contaminaciones cruzadas.
- Uso de guantes: Si es necesario manipular alimentos listos para el consumo, su uso es imprescindible. Recuerde cambiarlos frecuentemente para evitar contaminación.
- Control de temperatura: Los alimentos deben almacenarse a temperaturas seguras para prevenir el crecimiento de bacterias. Mantenga los congelados bajo -18°C y los refrigerados entre 0°C y 5°C.
- Capacitación continua: El personal debe recibir formación regular sobre higiene y seguridad alimentaria. Esto asegura que todos estén al tanto de los riesgos y cómo mitigarlos.
Con estas prácticas, su negocio no solo cumplirá con la normativa, sino que también ganará la confianza de sus clientes.