La calidad alimentaria es un conjunto de factores que, sumados, desembocan en la satisfacción del cliente y en la seguridad alimentaria de tus productos.
Hay que darle a la manipulación de alimentos la importancia que tiene en aras de conseguir una buena calidad alimentaria (características gastronómicas más nutricionales, precio y atención y, además, seguridad alimentaria)
Como responsables de un restaurante, hotel, cafetería, etc. tendremos que contestarnos a una serie de cuestiones:
- ¿Ofrezco la mejor atención posible a mis clientes?
- ¿Consigo que mis trabajadores den lo mejor de sí mismos atendiendo a la clientela?
- ¿Mi establecimiento es agradable, cómodo y está limpio a simple vista?
- ¿Soy consciente de que yo soy el responsable de la seguridad de los productos que ofrezco?
- ¿Están bien formados los manipuladores? Debemos fijarnos en sus prácticas de trabajo, no en si tienen un título de manipuladores de alimentos.
- ¿He puesto a disposición de los manipuladores todo lo necesario para llevar a cabo unas correctas prácticas de higiene? No sirve de nada que el trabajador sepa que tiene que lavarse las manos y que no haya jabón o papel para secarse.
- ¿Refuerzo positivamente sus buenas prácticas y atiendo sus demandas?
Por ello, se recomienda que las personas encargadas de los restaurantes mantengan una política de limpieza y se capacite al personal para hacerlo de manera constante, hacerlo parte de la rutina diaria para no verlo como algo pesado, sino como parte de una mejoría del día a día con relación a los clientes.
Hay empresas que se dedican a realizar Seguridad Alimentaria, con profesionales capacitados para asesorar a sus empleados, y despejar todas las dudas acerca del tema.