Salmonelosis, gastroenteritis bacteriana y la intoxicación con pescados o mariscos son algunos de los problemas de salud más frecuentes en verano derivados de lo que comemos o de las condiciones de los alimentos que tomamos. En vacaciones, rompemos los hábitos alimenticios, se pierde poco tiempo en la elaboración de los menús y se come fuera de casa con bastante asiduidad.
¿Cómo se produce una intoxicación alimentaria?
- Alimentos preparados por alguien que no se haya lavado las manos.
- Utilizar utensilios de cocina, tablas de cortar y otras herramientas que no estén bien limpias.
- Productos lácteos o alimentos que contengan mayonesa y que hayan permanecido fuera de la heladera mucho tiempo.
- Alimentos congelados o refrigerados que no se guarden a la temperatura apropiada o que no se recalienten a la temperatura correcta.
- Pescados crudos.
- Frutas o verduras crudas que no se hayan lavado bien.
- Zumos de verduras o frutas crudas y productos lácteos. Se recomienda comprobar si se incluye el término “pasteurizado” como garantía.
- Carnes o huevos mal cocidos.
- Agua proveniente de un pozo o de un arroyo, así como el agua que no haya sido tratada.
También en los hogares se debe mantener una serie de precauciones para evitar problemas:
- Mantener por encima de 65ºC las preparaciones calientes y en frío los alimentos frescos.
- La temperatura ambiente y el tiempo son dos factores que favorecen el crecimiento de bacterias en los alimentos.
- Existe una zona donde las bacterias se sienten muy cómodas y crecen más rápidamente: entre 5º y 65ºC.
- En la heladera los alimentos deben tener un orden específico, con los productos crudos de origen animal en la rejilla inferior.
- Al congelar los alimentos, es conveniente envolverlos en pequeñas porciones, en bolsas de plástico herméticas rotuladas con la fecha de inicio de la congelación.
- Las verduras deben ser lavadas y las carnes y aves, desgrasadas y deshuesadas antes de la congelación.
- Para descongelar los alimentos, utilizar el microondas o el frigorífico, pero nunca a temperatura ambiente.
La seguridad alimentaria depende de cada uno de nosotros.
FUENTE: www.doctologia.es