Consumir bacterias peligrosas transmitidas por los alimentos suele causar enfermedades dentro de 1 a 3 días después de consumir los alimentos contaminados. Sin embargo, la enfermedad también puede ocurrir dentro de 20 minutos o hasta 6 semanas después.
Los síntomas de las enfermedades transmitidas por los alimentos pueden incluir: vómitos, diarrea, dolor abdominal y síntomas similares a los de la gripe, tales como fiebre, dolor de cabeza y dolor del cuerpo.
Manejar los alimentos de manera segura
Aunque la mayoría de las personas saludables se recupera de una enfermedad transmitida por los alimentos dentro de un corto período, algunos pueden desarrollar problemas de salud crónicos, graves o incluso mortales. Además, algunas personas tienen un riesgo mayor de desarrollar enfermedades transmitidas por los alimentos, incluidas las mujeres embarazadas, niños, adultos de la tercera edad y personas con sistemas inmunes debilitados (tales como los pacientes de trasplante y personas con VIH/SIDA, cáncer o diabetes).
Para mantener a su familia segura del envenenamiento por alimentos limpie y separe los alimentos de la siguiente manera:
LIMPIAR
- Lávese las manos con agua templada y jabón durante al menos 20 segundos antes y después de manipular alimentos; y después de utilizar el baño, de cambiar pañales y de tocar animales.
- Lave sus tablas de cortar, platos, utensilios y mesadas con agua caliente y jabón después de preparar cada producto alimenticio.
- Considere el uso de toallas de papel para limpiar las superficies de la cocina. Si usa trapos de tela, lávelos con frecuencia usando agua caliente.
- Enjuague las frutas y verduras frescas con agua corriente, incluidas aquellas que vaya a pelar. Frote los productos más duros con un cepillo para frutas y verduras limpio.
- Recuerde limpiar la tapa de los productos enlatados antes de abrirlos.
SEPARAR
- Separe la carne cruda de los otros alimentos
- Separe del resto de los alimentos la carne, las aves y los pescados y mariscos crudos, así como los huevos, en el carro de la compra, en las bolsas y en el refrigerador.
- Use una tabla de cortar para las frutas y verduras frescas, y otra diferente para la carne, las aves, y los pescados y mariscos crudos.
- Nunca ponga alimentos ya cocinados en un plato que haya contenido carne, aves, huevos, pescados o mariscos crudos, a menos que el plato se haya lavado con agua caliente y jabón.
- No reutilice adobos que haya usado para alimentos crudos a menos que los haya hervido previamente.
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