Los guantes y los recubrimientos de plástico pueden constituir una barrera entre los alimentos y las bacterias. Sin embargo, pueden encontrarse tan contaminados como las manos si no mantenemos unas correctas prácticas de higiene.
Los guantes deben ser renovados con elevada frecuencia, para evitar que se acumule la suciedad que acompaña a los procesos de elaboración (contaminación de materia prima, posibles hábitos antihigiénicos de personal.
Uso de guantes en la industria de alimentos
Dentro de los diferentes usos en los que comúnmente se utilizan guantes para alimentación, se pueden destacar los siguientes sectores:
- Elaboración de alimentos: Para este tipo de trabajo se utilizan habitualmente guantes desechables especializados para la manipulación en seco y mojado. Este guante ofrece un tacto excelente y están fabricados mayoritariamente de nitrilo que aportan una gran resistencia y agarre gracias a su texturizado exterior.
- Mataderos y salas de despiece: En este tipo de trabajo se utilizan delantales de malla metálica. Pueden utilizarse también mandiles de poliuretano y nitrilo resistentes a grasas animales y sangre, que ofrecen un nivel de protección contra riesgos mecánicos y de penetración al agua.
- Alimentos del mar y pesca: Por último, podemos destacar los guantes que se utilizan para la pesca extractiva, así como el proceso de selección de pescados. En este caso se utilizan productos impermeables de látex o de PVC con soporte de algodón.
FUENTE: www.thefoodtech.com